Es la ultima huella de la época campesina del sector sur-poniente de La Florida, también es el lugar olvidado, que existe entre los paraderos de la locomoción colectiva y un parque a medio terminar.
Lamentablemente un espacio que debería ser un pequeño oasis de ruralidad entre lo urbano, se ha convertido en un especie de basural clandestino que pareciera nunca va a terminar.
Quizás seria fácil pedirle a la municipalidad que vaya a retirar el escombro que esta en ese lugar, el problema que lo más seguro que los próximo días aparezca de nuevo por arte de magia.
Esta acción fortalece la plaga de ratones que afecta hace mucho años a los barrios aledaños.
Inseguridad y motel Improvisado.
La falta de luz en las noches expone a quienes circulan diariamente por estas calles a robo y a otro tipo de delitos, situación que aumenta en invierno cuando los residentes d eLos Quillayes 7 o la Villa Don Francisco deben ir al Cesfam Los Quillayes, a tomar los Colectivos o el Transantiago.
Personas del sector comentan que no es extraño ver a parejas teniendo relaciones sexuales en cualquier hora del día.
Pavimentación urgente
Hace un par de años nuevos vecinos y vecinas llegaron gracias a los nuevos proyectos de vivienda social que se construyeron en los antiguos campos que estaban entre Rafael Matus y el Troncal San Francisco.
Los departamentos llevan siendo habitados hace un par de años y las calles siguen siendo de tierra y piedra.
En estas todavía quedan registros de las ultimas lluvias que sufrió la capital, eso puede notarse en las grandes posas que ocupan gran parte del camino y que se juntan con la basura que descansa en la vía pública.
